Fuente: Madrid/Geoscopio.
El desarrollo sostenible no es sólo un reto medioambiental sino un reto de progreso social, de ahí que el papel de las empresas sea fundamental para lograr un equilibrio entre bienestar y economía. El ministro de Medio Ambiente, Jaume Matas, resumía así, la complejidad de esta unión, en la Conferencia sobre Desarrollo Sostenible que se celebró ayer en Madrid.
El Foro de la Nueva Economía reunió a diversos profesionales del mundo de la empresa y el medio ambiente, que debatieron la Estrategia Española de Desarrollo Sostenible. Esa misma mañana el Gobierno había abierto el proceso de participación pública del documento, que recoge 150 propuestas para conservar los recursos naturales mediante una política preventiva.
El ministro destacó en su intervención en el Foro, la importancia de mantener este equilibrio, basándose en tres pilares: desarrollo económico, bienestar social y preservación del medio ambiente, pasando de las políticas anteriores, centradas en la corrección, a una nueva política preventiva.
"Prevenir las emisiones y los residuos de una empresa es una parte integral de la producción, es una estrategia de desarrollo, una forma de asegurar el éxito futuro de esa empresa", explicó Matas, "un reto global que sólo se puede alcanzar con la contribución de todos: empresas, asociaciones, ciudadanos...".
Así, según sus palabras, la consulta pública sobre desarrollo presentada ayer, sería el punto de partida para poder definir la política en los próximos 25 años. Sin embargo, varias asociaciones ecologistas han criticado las medidas que en el documento se propugnan, tachándolas de insuficientes y quejándose de la falta de participación que los grupos ecologistas han tenido en su elaboración.
El Documento recoge siete acciones sobre las que se debe actuar: crecimiento económico, gestión de los recursos naturales, formación tecnológica, cohesión social, lucha contra el cambio climático, turismo sostenible y gestión de los residuos.
Ante este último punto el ministro hizo hincapié en el importante papel que juegan las energías renovables en España, de las que se espera pasar del 6% actual al 12% en el 2010. A esta potenciación de las renovables contribuiría de manera esencial la biomasa y actuaciones clave como por ejemplo, la instalación de 3 millones de tejados solares en los hogares españoles hasta el 2010.
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