Fuente: Madrid/Geoscopio.
Basándose en los dictámenes de científicos independientes, la Comisión Europea propone reducir considerablemente la pesca de toda una serie de poblaciones de peces de importancia para la UE. Estas medidas constituyen la primera fase de una estrategia para favorecer la recuperación de diversas poblaciones, entre las que destacan la merluza y el bacalao, cuya capacidad de regeneración se encuentra seriamente comprometida.
Todos los Estados miembros con flota pesquera se verán afectados por estos recortes. "Estamos presenciando los resultados de demasiados años de sobrepesca y nos encontramos ahora ante un problema de difícil solución. Las poblaciones siguen menguando y la presión pesquera es demasiado elevada. Si queremos evitar la completa extinción de algunas poblaciones, lo que sería el fin de nuestros pescadores, la única vía posible es actuar con total determinación.
Tenemos que conservar la fuente de vida y trabajo de los pescadores: los peces. Espero que los Ministros de Pesca de la UE actúen con valor, decidan abstenerse de negociaciones políticas y procedan a fijar los TAC en niveles que garanticen una pesca sostenible."comentó Fischler, Comisario responsable de Agricultura, Desarrollo Rural y Pesca.
El número de poblaciones que, en opinión de los científicos, necesitan medidas de regeneración ha aumentado desde el año pasado. Lo que es más grave, si no se reduce urgentemente el nivel global de esfuerzo pesquero actual, el número de poblaciones en peligro de desaparición seguirá aumentando, como el lenguado del Golfo de Vizcaya y los langostinos de España.
La Comisión presentará planes de recuperación de todas las poblaciones en peligro de desaparición, planes de los que formarán parte integrante las indispensables reducciones de los TAC.
A pesar de las importantes reducciones aplicadas el pasado año a determinados TAC, la presión pesquera sigue siendo demasiado elevada. El resultado es un nivel de mortalidad que pone en peligro la capacidad de regeneración de un gran número de poblaciones comerciales.
Teniendo en cuenta que las poblaciones en peligro son capturadas junto con otras poblaciones, resulta necesario reducir también los TAC de las poblaciones asociadas. De no ser así, proseguirán las actividades de pesca correspondientes a los TAC no agotados y, por lo tanto, seguirán capturándose poblaciones en peligro.
Lo que la Comisión se propone es aumentar del 15% al 30%, según las poblaciones, el número de peces en desove; en principio, esa estrategia contribuirá a colocar a las poblaciones afectadas por encima de los límites biológicos de seguridad en un plazo de unos 5 años. Para ello, es preciso reducir las cantidades de peces extraídas del mar a través de la pesca.
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