Fuente: Madrid/Geoscopio.
La Consejería de Agricultura y Medio Ambiente ha destacado la necesidad de fomentar la agricultura ecológica, por tratarse de una producción respetuosa con el medio ambiente y cuya finalidad es obtener alimentos de máxima calidad. Por esto pretende triplicar la superficie actual dedicada al cultivo.
En la actualidad, Castilla-La Mancha cuenta con 14.790 hectáreas de cultivos ecológicos y con 424 operadores, entre productores y elaboradores (industrias agroalimentarias.
La Consejería ha presentado la nueva Orden que regula el procedimiento, tramitación y concesión de ayudas a la agricultura ecológica de Castilla-La Mancha, una norma con la que, según el consejero "pretendemos triplicar en el plazo de cinco años la superficie actual dedicada a este tipo de producción".
La agricultura ecológica pretende la obtención de productos de calidad, respetando el medio ambiente y conservando la fertilidad del suelo mediante el uso óptimo de los recursos y sin emplear productos químicos de síntesis ni en la producción, ni en las posteriores transformaciones de los productos.
Para ello, se desarrollan técnicas agrícolas que buscan promover relaciones sostenibles entre el suelo, las plantas, los animales, las personas y la biosfera. Esta nueva línea de ayudas se enmarca dentro las denominadas ayudas agroambientales contempladas en las medidas de acompañamiento aprobadas para España por la Unión Europea el 20 de diciembre del 2001.
Para solicitar estas ayudas es necesario estar inscrito en el Registro de agricultores con parcelas en producción ecológica de Castilla-La Mancha o en el de aquellos órganos de control que hayan sido autorizados por la Consejería. Asimismo, es imprescindible haber recibido formación en agricultura ecológica de, al menos, 50 horas lectivas.
También necesario contar con una superficie mínima para cada grupo de cultivo. Estas superficies oscilan entre las 0,30 hectáreas en los cultivos hortícolas hasta las 2 hectáreas en los herbáceos de secano. Para poder recibir estas ayudas, los agricultores se comprometen a cumplir una serie de medidas de carácter agroambiental, así como a la realización de las denominadas buenas prácticas agrarias en el conjunto de su explotación.
Para la puesta en marcha de estas ayudas y para cumplir el objetivo de triplicar la superficie de agricultura ecológica de la región, el presupuesto para financiar las ayudas sería de 8,4 millones de euros (1.400 millones de pesetas) para cinco años. La financiación de estas ayudas se realizaría en un 75% a través del Feoga-Garantía y el 25% restante sería aportado conjuntamente por la Consejería y el Ministerio de Agricultura.
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