Con una inversión de alrededor de 9 millones de euros se va a llevar a cabo la construcción de una planta de secado de lodos en la fábrica de CEMEX de Alicante. Esta instalación, que ocupará unos 1.500 metros cuadrados, permitirá secar 60.000 toneladas de lodo anualmente, cantidad equivalente a la producción conjunta de lodos de Alicante y Elche.

La construcción de esta planta de secado permitirá conseguir un importante ahorro de energía, ya que se aprovechará el calor sobrante del horno de cemento, y no será preciso consumir otros combustibles para producir la energía necesaria para el secado de los lodos. Por lo tanto, disminuirá la cantidad de CO2 producido.

La planta de secado de lodos de CEMEX ya ha obtenido la Declaración de Impacto Ambiental, que garantiza que la actividad es perfectamente compatible con el medioambiente y cumple con todos los requisitos exigidos por la Conselleria de Medioambiente, Agua, Urbanismo y Vivienda y la Autorización Ambiental Integrada, que autoriza la construcción y puesta en marcha de la instalación. Asimismo, CEMEX posee la ISO 14001 de calidad de la gestión medioambiental concedida por AENOR, que implica un compromiso de mejora continua, y certifica que se trabaja de una forma medioambientalmente correcta.

Proceso de secado de lodos

Los lodos húmedos llegados a la fábrica se someterán a un análisis, para garantizar que se cumplen una serie de parámetros, antes de llevar a cabo el proceso de secado, aprovechando el calor sobrante del horno de cemento.

El secado térmico permitirá eliminar el agua contenida en los lodos, transformando su consistencia húmeda-pastosa en un producto “peletizado” (pequeñas bolas de lodo seco).

Esta instalación estará constituida por dos túneles de secado térmico, un intercambiador aire-agua para aprovechar el calor residual del horno de cemento, y las instalaciones de descarga y almacenamiento de lodos húmedos y los depósitos de lodos secos. Cada túnel de secado tendrá capacidad para tratar unas 30.000 toneladas de lodos al año.

El proyecto de CEMEX contempla medidas para garantizar la ausencia de posibles olores tanto en la recepción, que contará con sistemas de aspiración de aire y de tratamiento del mismo, como en el proceso de secado, que se realizará en unas instalaciones totalmente cerradas.

Antecedentes

La construcción de esta planta de secado de lodos es fruto del convenio de colaboración que firmaron en noviembre de 2003 la Entidad Pública de Saneamiento de Aguas de Valencia y CEMEX, por el que la cementera se comprometía a ceder gratuitamente durante 15 años el calor necesario para secar los lodos húmedos procedentes de estaciones depuradoras de aguas residuales de la Comunidad Valenciana.

Asimismo CEMEX y la Empresa Mixta de Aguas Residuales de Alicante, S.A. (EMARASA) han firmado un acuerdo por el que esta última gestionará lo relativo al proceso de secado de los lodos.

La firma de este convenio de colaboración da solución a un problema social de gestión de residuos, ya que hasta ahora era difícil dar un tratamiento adecuado a los lodos, debido a su alto contenido en agua (en torno al 75%).

Tendrán prioridad los lodos procedentes de las EDAR de Alicante (Monte Orgegia y Rincón de León), así como cualquier otra EDAR pública de la Comunidad Valenciana.

Valorización energética

El Plan Nacional de Lodos de Depuradoras de Aguas Residuales 2001-2006 establece como principales usos posibles de los lodos de depuradora: la aplicación como compost en la agricultura, la valorización energética y el depósito en vertedero, por este orden.

La valorización energética en las cementeras consiste en la destrucción de un residuo al tiempo que se aprovecha energéticamente al introducirlo en el horno de cemento, en sustitución por combustibles fósiles. La valorización energética de lodos es un procedimiento contrastado y habitual en otros países europeos como Suiza, Francia y Bélgica, y para el que es preciso contar con instalaciones específicas, además de los correspondientes permisos administrativos.

Una correcta gestión de residuos respetuosa con el medio ambiente y el desarrollo sostenible, son las premisas que han imperado en las ambiciosas legislaciones medioambientales implantadas en estos países.

La valorización energética resuelve un problema social de gestión de residuos, además de disminuir el consumo de combustible fósiles (como el coque de petróleo o el carbón), lo que permite la reducción de las emisiones de Co2, como indican las directrices de la cumbre de Kyoto.

La recuperación energética de lodos en cementeras, o lo que es lo mismo la eliminación de los lodos al tiempo que se logra un aprovechamiento energético al introducirlos en los hornos de cemento, añade más ventajas medioambientales al proceso de secado, ya que supone una disminución del consumo de combustibles fósiles, y una mayor reducción de las emisiones de CO2 a la atmósfera.

En 2004, el departamento de Ingeniería Química Industrial de la Universidad de Alicante realizó un estudio sobre el empleo de este combustible alternativo en la cementera de Alicante. Este estudio demostró que “los resultados se encuentran por debajo de los límites de emisión fijados por la normativa correspondiente, para evitar o reducir en el mayor grado posible los efectos negativos de estas emisiones en el medio ambiente y los riesgos resultantes para la salud humana”.

En concreto, el estudio de la UA midió dioxinas, furanos, metales pesados, ácido clorhídrico y fluorhícrico, compuestos volátiles y semivolátiles, y gases en el horno de cemento, funcionando con diferentes proporciones de lodos de depuradora como combustible.

En las conclusiones del estudio se destaca que “los valores determinados de los diversos contaminantes no suponen un impacto añadido en el entorno de la fábrica estudiada como consecuencia del empleo de lodos de depuradora como combustible”.