IBERDROLA ha formalizado la adjudicación del complejo hidroeléctrico del Alto Támega, en Portugal, cuyos casi 1.200 megavatios (MW) de potencia instalada lo convierten en uno de los mayores proyectos de estas características abordados en los últimos 25 años en toda Europa.

El contrato de adjudicación ha sido ratificado por Ignacio Galán, Presidente de IBERDROLA, y el Primer Ministro de Portugal, José Sócrates, en un acto celebrado en la ciudad lusa de Chaves, cercana al futuro emplazamiento de este nuevo aprovechamiento hidroeléctrico, con el que se culminará el desarrollo de la Cuenca del Duero.

El evento de presentación del proyecto ha contado con la presencia, asimismo, de los ministros portugueses de Economía e Innovación, Manuel Pinho, y de Medio Ambiente, Ordenación del Territorio y Desarrollo Regional, Francisco Nunes Correia, así como de diversas autoridades regionales y locales portuguesas.

Por parte de IBERDROLA han acudido, entre otros directivos, el Director de Operaciones, Iberia y Latinoamérica, José Luis San Pedro; el Director de Recursos Corporativos, Fernando Becker; el Director de Negocio Liberalizado España y Portugal, Francisco Martínez Córcoles, y el Presidente de la Compañía en Portugal, Joaquim Pina Moura. En el transcurso de su intervención, Galán ha agradecido a las autoridades portuguesas “la confianza que han depositado en 

IBERDROLA” y ha destacado que “el que hoy se presenta es uno de los proyectos hidráulicos más importantes abordados en los últimos 25 años en Portugal; uno de los últimos grandes aprovechamientos hidroeléctricos de Europa; un proyecto del que estoy seguro nos vamos a sentir profundamente orgullosos”. Para 

IBERDROLA, ha proseguido el Presidente, “supone reforzar nuestros lazos y nuestro compromiso con Portugal, un país al que nos sentimos especialmente unidos y en el que queremos ser motor de desarrollo, ayudando a hacer frente a sus necesidades energéticas y, de esta manera, colaborando en su desarrollo económico y social”. Está previsto que el proyecto genere 3.500 puestos de trabajo directos y 10.000 indirectos.

 Experiencia centenaria en centrales hidráulicas Ignacio Galán ha señalado que esta iniciativa “representa una muestra más de nuestra apuesta histórica por las energías limpias, así como una importante aportación al mercado ibérico de electricidad” y que, para su desarrollo, “IBERDROLA va a poner a disposición de este proyecto toda su experiencia centenaria en la construcción de grandes centrales hidráulicas”.

Tras recordar que el Grupo ya cuenta en la actualidad con cerca de 10.000 MW hidráulicos en todo el mundo, ha recalcado que con el complejo del Alto Támega “vamos a seguir impulsando el medio ambiente y la sostenibilidad, evitando la emisión de 1,2 millones de toneladas de CO2 al año”.

IBERDROLA, cuyo proyecto industrial superó en el concurso al planteado por otros operadores eléctricos de la Península Ibérica, prevé destinar, entre los años 2012 y 2018, alrededor de 1.700 millones € a construir cuatro nuevas presas -Gouvães, Padroselos, Alto Támega y Daivões-, que podrá explotar durante un periodo de 65 años.

Estas nuevas centrales, las dos primeras de bombeo (900 MW) y las otras dos de turbinación pura (234 MW), serán capaces de producir unos 2.000 gigavatios hora (GWh) al año, cifra que representa el 3% del consumo eléctrico portugués y que será suficiente para atender el consumo anual de aproximadamente un millón de personas.

Mediante esta adjudicación, con la que IBERDROLA ratifica su compromiso con las tecnologías más limpias de generación de electricidad y que contribuyen a disminuir la dependencia energética, la Compañía hace valer asimismo su experiencia y saber hacer más que centenarios en el diseño, desarrollo y gestión de grandes aprovechamientos hidroeléctricos.

Del mismo modo, el planteamiento de la Empresa a la hora de encarar la construcción del complejo del Alto Támega se adapta a la perfección a las necesidades energéticas actuales y futuras del mercado ibérico de la electricidad. En esta línea, cabe destacar tanto su rápida capacidad de respuesta de cara a atender las puntas de demanda como su contribución a los objetivos medioambientales fijados por Europa para 2020.

Además, dada la ubicación de esta nueva infraestructura, a escasa distancia de Galicia -donde está previsto reforzar las interconexiones eléctricas entre España y Portugal- y próxima a los aprovechamientos españoles de Duero y el Sil, IBERDROLA espera optimizar sus costes de explotación.