El compromiso firmado entre la Consejería y doce ayuntamientos almerienses el pasado mes de junio para realizar los trabajos del "barrido cero" establecía que corresponde a las Corporaciones locales localizar y cuantificar los residuos, llevar a cabo su tratamiento, elaborar un Plan de Higiene Rural, así como poner a disposición de la Consejería los vertederos municipales y las plantas de tratamiento necesarios ("La Joya", en el Poniente, y la de "Albaníjar", en el Levante).

La Consejería se encarga de ejecutar la limpieza inicial (barrido cero), financiarla y colaborar con las Administraciones locales, con el objetivo de crear una base para la sostenibilidad de la limpieza en el campo.

El tipo de residuos vegetales que se eliminan es biomasa (restos de cultivos y malas hierbas), envases de productos fitosanitarios, sustratos, cartones y maderas, así como plásticos y metales empleados en las estructuras de los invernaderos.

Para llevar a cabo estas tareas de limpieza previas, que se han prolongado por espacio de seis meses, los residuos se han retirado con maquinaria especializada y manualmente en aquellos lugares de difícil acceso. En estas actuaciones, la Consejería han invertido más de 6 millones de euros (1.010 millones de pesetas) y han participado 140 operarios y 300 unidades de maquinaria para retirar un total de 1.650.817 metros cúbicos de residuos vegetales.

Así, el balance de las tareas supone que se han retirado un total de 791.475 metros cúbicos de residuos agrícolas.