La planta, situada en La Robla (León) será pionera en España en el aprovechamiento energético de los residuos generados por la industria avícola. Utilizará la gallinaza como combustible principal, evitando los daños medioambientales que generan su vertido.

El proyecto dirigido y desarrollado por la sociedad Energías Renovables de la Robla S.A. (ERRSA) ha sido subvencionado por el Fondo Europeo de Garantía Agraria (FEOGA) con 1,3 millones de Euros, lo que constituye el 24 % de la inversión total.

La planta de biomasa agroganadera, que en el contexto europeo sólo tiene los antecedentes de experiencias similares desarrolladas en el Reino Unido, otorga una solución integral al problema de los residuos, por un lado, obteniendo energía eléctrica a través de su combustión, y por otro, con la reutilización de las cenizas obtenidas como abono de superficies agrarias.

De esta forma se evitará el vertido de los deshechos generados por el sector avícola que provocan efectos medioambientalmente nocivos como:

• Interacción sobre el suelo, dado que los residuos fecales con alto nivel de nitratos y fósforo que en exceso produce fitotoxicidad.
  
• Interacción con la atmósfera, puesto que su vertido incontrolado provoca altas emisiones de metano y amoniaco, claves para el efecto invernadero.
  
• Alto riesgo de contaminación biológica de tipo bacteriana.

Si bien, la puesta en funcionamiento del proyecto no sólo contribuirá de forma decisiva a la conservación del entorno. De él también se derivan otros importantes beneficios de naturaleza económica y social como es la generación de empleo cualificado en la región.

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