Fuente: Madrid/Geoscopio
Presentado el II Estudio de Inversión y Empleo en el sector forestal, preparado por ASEMFO, y donde se analiza el volumen de mercado que representan las actuaciones en el sector forestal, tanto de ámbito estatal como autonómico, desde un punto de vista económico y cuantitativo; así como el empleo generado por el sector, que ha descendido un 15%.
La pasada semana tuvo lugar en Madrid la presentación del "II Estudio de Inversión y Empleo en el sector forestal (periodo 2000-2001) elaborado por ASEMFO (Asociación Nacional de Empresas Forestales) con la financiación de la Dirección General de Conservación de la Naturaleza.
El objetivo fundamental del estudio es ofrecer en un solo documento todas las inversiones públicas que se destinan a la protección del Medio Natural, así como de los sistemas y vías de ejecución a través de los cuales se desarrollan estas actividades, para poder valorar objetivamente la importancia que tienen los bosques para la sociedad actual.
Por otra parte, el documento pretende mostrar las repercusiones económicas de la política medioambiental sobre la actividad económica en general, con el consiguiente efecto sobre variables como el empleo.
Los datos de superficies forestales actualizados reflejan la creciente superficie forestal del país (26 millones de ha, de las cuales más del 70% es de titularidad privada), con un aumento generalizado de las superficies forestales, que no siempre lleva asociado un aumento similar en los medios destinados a la gestión.
Durante el pasado año la inversión total de la Administración fue de 804 millones de euros, de los cuales 213 millones de euros correspondieron a la administración central.
En el caso de las CCAA, que representan las mayores inversiones (próximas a los 600 millones de euros) su distribución es muy irregular. Así, mientras que algunas comunidades registran elevadas inversiones ha/año, como es el caso de Madrid (108 euros ha/año) otras, como Cataluña, tienen unas inversiones extraordinariamente reducidas (ligeramente superiores a los 4 euros ha/año).
El estudio también muestra que a nivel autonómico, la relación de terrenos forestales-inversión-empleo es bastante directa, a excepción de algunas comunidades que se encuentran por debajo de la media.
A la vista de la dispar evolución de las inversiones, una de las principales conclusiones del informe es que para poder contribuir al modelo de desarrollo sostenible rural, las empresas forestales necesitan una oportunidad en forma de concursos públicos, y un ritmo inversor continuado, sin altibajos inversores que ajusten anualidades presupuestarias con adjudicaciones directas a empresas públicas.
En general el informe concluye que este sector, pese al elevado valor de los montes en España que se cifra en 9.000 millones de euros, no está considerado como un sector estratégico, como una infraestructura básica estatal, para los estamentos políticos. Sin embargo, en un país con una considerable superficie forestal (51% del territorio), invertir en bosques es una apuesta económica de futuro y una garantía de calidad de vida de los ciudadanos.
Al acto, que congregó un elevado número de especialistas en la materia, fue presidido por el Presidente de ASEMFO, Miguel Ángel Duradle y la Directora General Conservación de la Naturaleza, Inés González Doncel.
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