Más de 750 millones de agricultores chinos adoptarán la tecnología española de regadío para modernizar sus parcelas
Jueves, 10 de Agosto de 2006
Fuente: Geoscopio/Madrid. Más de 750 millones de campesinos chinos adoptarán la tecnología española de regadío para modernizar sus parcelas a través de un sistema democrático de gestión agraria. La Federación Nacional de Comunidades de Regantes (FENACORE) ha alcanzado un acuerdo de cooperación con el Gobierno de la República Popular China, por el cual exportará el sistema español de gestión de las comunidades de regantes a este país asiático, con el objetivo de trasladar su experiencia directa sobre el funcionamiento y características de estas instituciones milenarias en España.
Esta colaboración, que se inició el pasado mes de diciembre a raíz de un viaje de estudios a España de autoridades chinas del Ministerio de Recursos Hídricos, permitirá asimismo a la Federación transmitir sus conocimientos y experiencia sobre la modernización de regadíos, con el fin de contribuir a alcanzar una administración racional del agua de riego en zonas rurales marginales.
El objetivo fundamental de este acuerdo es crear una nueva gestión del agua en China, capaz de favorecer el desarrollo rural de zonas agrarias marginales y alcanzar una sociedad moderadamente acomodada en todo el país. En la actualidad, el 58% de la población china (757 millones de personas) habita en zonas rurales marginales y el 72% de la población activa trabaja en el sector agrario.
Fenacore considera que el modelo general de asociaciones de usuarios de agua que las instituciones chinas aspiran implantar para su agricultura está "muy próximo" al sistema español de comunidades de regantes y se basará, como el nuestro, en criterios democráticos y participativos.
No obstante, advierte que esta fórmula se encuentra todavía "bastante alejada" del concepto que se maneja en España de las comunidades de regantes ya que, desde una óptica sociopolítica, todavía no se han dado los procesos participativos necesarios para que los campesinos asuman esta idea, como propia.
Además, desde el punto de vista administrativo, la República Popular China carece de una legislación específica de aguas, que contemple sus características y funciones, así como de una coordinación institucional con competencias territoriales y organizativas bien definidas, que permita, a su vez, la creación y asunción de tareas por parte de los organismos de cuencas.
En el marco de este acuerdo de colaboración entre Fenacore y el Gobierno de la República Popular China, la Federación tiene previsto realizar un viaje en los próximos meses a China al que acudirán cerca de medio centenar de presidentes de las diferentes comunidades de regantes federadas a Fenacore, pertenecientes a las distintas provincias españolas, incluidas las insulares.
Millones de campesinos adoptarán la tecnología española de regadío para modernizar sus parcelas
Por otro lado, además de transmitir su experiencia sobre la constitución y operativa de las comunidades de regantes, Fenacore cooperará con el Ministerio de Recursos Hídricos en la modernización de los regadíos en colaboración con la sociedad estatal española TRAGSA. En este sentido, explica que si bien China ha cumplido en las últimas décadas con su propósito de poner en marcha grandes obras de infraestructura hidráulica, tiene todavía pendiente la modernización de regadíos, lo cual exige una adecuación administrativa y tecnológica.
Además, añade que el regadío en China se encuentra tecnológicamente en un momento de cambio y adaptación y, por ello, las autoridades del país prestan especial atención a los modelos que han alcanzado éxito en otros países con una larga tradición en el desarrollo de tecnología en este campo, como es el caso de España o Reino Unido.
Los desarrollos tecnológicos chinos se centran actualmente en el desarrollo del riego por su capacidad para aumentar la superficie cultivable y racionalizar el consumo de agua. Según Fenacore, "la tecnología española de regadío es un modelo a imitar a medio plazo por el Gobierno chino porque está en los primeros puestos a nivel mundial, es mucho más variada que en otros países poseedores de tecnologías avanzadas y su desarrollo es fruto de un proceso continuado en el tiempo que es posible emular".
Con este objetivo, Fenacore cooperará con el Gobierno chino en la formación de un equipo de expertos en regadío, capaces de contribuir al ahorro eficiente de agua y a la protección de los recursos hídricos. También, aportará su particular experiencia en la ejecución de obras dentro de las zonas r egables, así como en la implementación de sistemas de medición de agua y optimización de la asignación del recurso.
Finalmente, la Federación Nacional de Regantes colaborará para determinar la dotación de riego necesaria para cultivos específicos y la evaluación ambiental de las zonas regables. En la actualidad, alrededor del 80% de los sembrados en China se dedica a cultivos alimenticios. Este país asiático es el mayor productor mundial de arroz -que ocupa un tercio del área cultivada total-, trigo, algodón, cacahuetes y semilla de colza; el segundo en maíz y el cuarto en producción de soja, que representa el 8% de la superficie total de cultivo.
Según el presidente de Fenacore, Andrés del Campo, "el Gobierno chino ha prestado una creciente atención a la expansión de cultivos para el desarrollo de la industria textil. El más importante de estos cultivos es el algodón, con una producción anual de 12 millones de toneladas. Otras fibras a destacar son el lino, que se utilizan para confeccionar ropa de cama y otros tejidos finos; el yute y el cáñamo, con los que se fabrican sacos y cuerdas".
China cuenta con una superficie de 9,6 millones de kilómetros cuadrados y una población de 1.300 millones de habitantes, de los cuales el 58% habita en zonas rurales. Este país asiático concentra más de 1.500 ríos, cuyas cuencas superan los 1.000 kilómetros cuadrados cada una. El volumen de flujo fluvial anual medio alcanza los 2,7 billones de metros cúbicos, ocupando el sexto lugar del mundo. El 72% de la población activa trabaja en el sector agrario pero tan sólo el 14,5% de la superficie total de China está cultivada (situada, sobre todo, en su parte oriental). China es uno de los países con mayor superficie irrigada ya que la mitad de la tierra cultivada es de riego. La superficie total de regadío alcanza los 54,5 millones de hectáreas mientras que la superficie total sembrada supera los 153,5 millones de hectáreas.
Enviar la noticia a un colega