Las obras de modernización de las infraestructuras de regadío de la Comunidad de Regantes de Campotéjar, en Murcia, proyectadas por el MAPA y promovidas por SEIASA del Sur y Este, han recibido el visto bueno de la Secretaría General para la Prevención de la Contaminación y el Cambio Climático del Ministerio de Medio Ambiente. La Resolución , publicada en el BOE número 9, de 10 de enero de 2007, pone de manifiesto los efectos positivos de las obras al disminuir la sobreexplotación del acuífero Ascoy-Sopalmo, gracias a la reutilización de las aguas depuradas de la EDAR Molina - Norte y la mejora en la gestión de los sistemas de regadío al aplicarse el riego por goteo, que permite un control de la dosis de riego y la localización de su aplicación, reduciendo sus efectos sobre el suelo. 

Los trabajos acometidos por el MAPA beneficiarán a 1.032 agricultores integrantes de la Comunidad de Regantes de Campotéjar y afectarán a 1.950 hectáreas ubicadas en el término municipal de Molina de Segura en Murcia, zona dedicada al cultivo de frutales de hueso, cítricos, uva de mesa y cultivos hortícolas. La situación de sequía actual aconseja realizar las obras precisas para incorporar las aguas procedentes de la EDAR Molina - Norte en el Sector II de sus regadíos. La reutilización de estas aguas supondrán el 17'38 % del total de la dotación disponible, mezclándose con otros caudales de distintas procedencias, minimizando la contaminación y la salinización de suelos. La estación depuradora cuenta con un tratamiento terciario físico-químico con decantación, filtración de arena y desinfección mediante luz ultravioleta. La mejora medioambiental viene determinada, además, por los controles establecidos en el proyecto entre los que se incluye un Plan de vigilancia de la calidad del agua depurada, un Plan de vigilancia sanitaria y un Plan de formación para los manipuladores. 

El proyecto cuenta con un presupuesto total de 1.567.880 El nuevo sistema adoptado de riego por goteo hace imprescindible la dotación de las infraestructuras necesarias para la distribución del agua a través de una red presurizada, hasta los contadores volumétricos de las parcelas. Se instalarán un total de 11.245 metros de tuberías, valvulería y otros accesorios. Para el aprovechamiento de las aguas procedentes de la EDAR será necesaria una tubería de impulsión capaz de conducir un caudal de 250 l/s con una longitud de 7.000 metros provista de piezas especiales. Además se prevé la instalación de tres grupos de electrobombas para fraccionar el suministro del caudal y poder adaptarlo a la demanda. 

La Resolución destaca positivamente la utilización de recursos ya existentes en la zona, como las canteras para la obtención de los volúmenes de material de relleno y préstamos de tierras. El 88% de las que procedan de la excavación se emplearán en el relleno de zanjas, y el resto se depositarán en un vertedero de inertes autorizado. Los residuos generados en la fase de construcción serán tratados en función de su peligrosidad, los asimilables a urbanos serán depositados en contenedores municipales para su posterior retirada y tratamiento. Los calificados como peligrosos se gestionarán por parte de personal autorizado por la Consejería de Medio Ambiente de la Región de Murcia.